De espejismos
está hecho mi reflejo
entre la gama de avellana y oro
de tu mirada
Fragmentos de poemas
evocando música de trovador,
la infinidad de vidas
que hemos tocado
en traslúcidas ilusiones
sin olvidar las manchas de pintura
y tus lunares.
Nada tangible
ni de aroma duradero.
Siquiera algunos pocos gemidos
susurrantes
tejidos con plata a un manto
carmesí
y la imagen de tus manos
(manos creadoras, indudablemente)
atropellando palpitos
como un desbocado frenesí
virgen de razones.
I.E.
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